Tradición con innovación para hacernos la vida más fácil. De generación en generación.
La Antigua Churrería fue creada por Julio Quiroga en 1913 en Madrid. Implantando un oficio y una tradición en su familia que ha pasado varias generaciones y que se ha seguido transmitiendo hasta el día de hoy de padres a hijos. Hoy son la cuarta generación de churreros quienes dirigen el negocio familiar. Basado en la venta de churros y chocolate ya sea a domicilio, en el local o para llevar a casa o a la oficina.
La preparación menestral y el sabor legítimo son sus puntos fuertes. No sabemos si se trata de la generación o si el oficio de churrero se lleva en la sangre. El concepto de la churrería lo adecua a los nuevos tiempos, por su escenografía, su estilo y la innovación del servicio a domicilio. Chocolate y churros recién hechos y llevados a tu casa en transporte desde primera hora de la mañana.
Tras muchos años de éxito empresarial y con varios locales actuando en Madrid, La Antigua Churrería se extenderá a modo de franquicia por todo el territorio español. Impulsará un plan de expansión que incluye el estreno de 8 nuevos locales en 2019 y 15 establecimientos más en 2020, con un plan de inversión de 750.000 euros en los próximos meses.
Tradición con innovación para hacernos la vida más fácil.
Actualmente cuentan con 5 establecimientos en la Comunidad de Madrid y buscan expandirse por todo el territorio nacional.
Para las personas que se van a franquiciar por primera vez, el beneficio anual alcanza el 15% neto. Más del 30% de la facturación de La Antigua Churrería se consigue con el envío a domicilio de churros, porras y las variedades de chocolate de las que disponen.
Para obtener más información sobre esta empresa puede consultar en su página web www.laantiguachurreria.com o si desea adquirir alguna aclaración sobre otras franquicias puede hacerlo aquí